La UNESCO ha incluido al cocedero de chochos ‘La Cabra’ de Monesterio, en la lista de Patrimonio Cultural Inmaterial como ejemplo de la construcción con piedra seca.
Según se indica en la información de Turismo Badajoz, se trata de un conjunto de inmuebles que data de las primeras décadas del siglo XX, antaño dedicado a la ganadería del cerdo. Está situado junto a un manantial, en un entorno de encinar adehesado. Encontramos una huerta rectangular, delimitada por un muro de piedra, cuya parte superior está rematada con un tejadillo de función puramente ornamental.
La noria surtía de agua al conjunto. En la construcción, se puede observar su estructura y su entrada, una puerta con arco de medio punto de ladrillo bien conservado. El interior forma una sencilla bóveda de cañón hasta el manantial, cuyo pozo está rematado con una baranda de hierro
En las albercas llenas de agua las legumbres perdían su amargor y toxicidad. La cocción de los altramuces se llevaba a cabo cerca de las albercas, en una plataforma cilíndrica de ladrillo y piedra donde se encajaba una caldera de hierro. Por último, la casilla del hortelano, de planta cuadrada y con muros levantados a dos alturas, está construida en mampostería de piedra y tapial, con cubierta a dos aguas.
Desde los años 60, con el abandono de las actividades agroganaderas y la emigración de los habitantes de las comarcas extremeñas, el conjunto es condenado al olvido, hasta su declaración como Bien de Interés Cultural en el año 2012.
(las imágenes han sido tomadas de Hoy Monesterio, Ayuntamiento de Monesterio y periódico del IES Maestro Calero)