El pasado sábado, 23 de julio se llevó a cabo la IV Muestra GastroStar, un evento organizado por la Mancomunidad de Tentudía que como cada edición se celebró en un entorno único, como es el Monasterio de Tentudía, una joya mudéjar cargada de historia y leyenda, para vivir nuevamente una noche mágica.
Así, Jesús Aparicio López, gerente de la citada entidad, abriría el acto, haciendo hincapié con motivo del 46 aniversario de la misma, ya que es la asociación de municipios más antigua de Extremadura, creada alrededor del pantano que abastece a la comarca, efemérides que no ha de pasar inadvertida.
Un proyecto, la muestra GastroStar, que detalló, comenzó en el 2017 «con muchas incertidumbres, pero hoy estamos aquí después de 4 años y esta pausa por la pandemia, con lo cuál arrancamos esta GastroStar postpandemia».
Ubicaba al público de como: «Estamos en el Monte de Tentudía, el monte más alto de la provincia de Badajoz, de ahí que este sitio es especial para todos los que estamos en la comarca». Narrando, acto seguido, que, «en el año 1248 se libró aquí la batalla de Tentudía en la reconquista de España. Concretamente en esta lucha con los musulmanes, el Maestre Pelay Pérez Correa en esa gran lucha que venía desde el norte de España, aquí se libró una batalla muy importante, en el cual esa noche peligraba la victoria para los cristianos, el Maestre, dice la leyenda, se encomendó a la virgen para que detuviera el día y de ahí el nombre de Santa María (de) ‘ten tu día’».
La noche ha sido amenizado por una orquesta de cuerdas, el cuarteto de cámara «Alla Corda» y por un grupo de Jazz «Swing Ton Ni Son». Y ha contado con dos sumilleres extremeños: Catalina Bustillo Caballero y Carlos Jesús Vivas Vivas.
Y por supuesto, no faltó sorpresa para los asistentes a la Muestra donde, entre el público uno de los jóvenes subiría al estrado para declarar su amor y pedir matrimonio a su amada, «eres la persona con la que quiero compartir el resto de mi vida y por eso hoy, aquí, esta noche me gustaría pedirte, si te quieres casar conmigo.» Y por supuesto la respuesta no pudo ser otra que afirmativa.
Por último, Quiñones cerraba así, «participamos de nuevo en esta experiencia elegante y atractiva, en un marco incomparable donde, un año más, ‘Entre Encinas y Estrellas’ ha deleitado a todos comensales descubriendo el universo desde este lugar increíble».